Para Ema y Violeta
mis amigas más pequeñas
“Preguntaron a un proletario en el tribunal
qué fórmula elegía para su
juramento: la religiosa o la laica.
«No tengo trabajo», contestó.”
Bertol Brecht
Dicen que en un pueblo de montaña,
pero verde que te quiero verde,
montaña verde que se recuesta en un río
largo como el lagarto bilingüe
que nace brasilero y muere porteño.
Dicen,
digo
que una maestra como las de antes
de las que juegan con los niños
y los quieren no importa lo que sean
una maestra como la que yo encontré
cincuenta años después
que me enseñara a cantar el himno guerrillero
y me besó en la frente, de nuevo
una maestra de las que enseñan
como si no enseñaran
les dijo a los niños, un día de otoño
en medio del verde que te quiero verde,
que ese día jugarían a ser Dios
y que cada uno podría pedir que se haga real
el sueño más loco, ese que ni se atreven a soñar
y dicen,
Digo
que el primer niño la miro fijo
y le pidió que vuelva la madre muerta
y el otro le pidió que vuelva la madre
que se había ido, dejándolos solos
y que hubo una niña,
que solo le pidió
volver a recordar la madre
porque se le había olvidado
en los cinco años que no estaba
y dicen,
Digo
que el siguiente niño la miro altivo
y le pidió trabajo para el papá
que estaba harto de bolsas y cajitas
y el otro dijo que quería veinte pesos
para poner carne al guiso que
desde Navidad solo fideos y fideos
y dicen,
Digo
que el último que habló,
los demás no se animaron,
primero pidió una cama para dormir solito,
sin sus seis hermanos con él
y que después pensó y pidió
una casa nueva para su familia
que no sea el rancho de siempre
y al final, como si hubiera encontrado
en el aire la solución
de todo
los ojos le brillaron cuando
dicen que dijo,
le cambio todo
por trabajo para papá
y dicen,
Digo
que aquella maestra
que había recortado con amor figuras
de juguetes y caballitos blancos
de una cocina y de cinco pelotas,
para repartir al final del juego
comprendió que había aprendido
la lección que solo Dios te puede dar
y que el viejo alemán
le copió hace un siglo
antes de jugar y de cantar
antes de bailar y de reír
los niños necesitan una mamá
y un papá que tengan
trabajo y casa
una cama con un oso en lugar
de almohada
y un trabajo de esos
que los niños sueñen con tener
cuando sean grandes
dicen
Digo
Que cuando los niños juegan a ser Dios
son más niños que nunca
porque al darles la posibilidad
de cumplir cualquier deseo
se muestran en su fulminante inocencia
Muchisimas gracias Jose, enorme la poesia, como todo lo que escribis.
Me recuerda algo que me paso hace ya unos varios años.
La directora de una escuela del Barrio El Jalon de Quilmes Oeste (asentamiento aledaño al Acceso Sudeste a la altura de Ezpeleta-Berazategui) habia pedido que ¨el MEDH le hable a los chicos, porque estan muy violentos¨.
Comence el taller (del que participaban tambien las mamas y las maestras) invitando a los chicos y chicas a compartir -si querian- los sueños que tenian para sus vidas y los deseos para su futuro…
La primera en hablar fue una nenita menuda de 8 o 9 años, que conto que su sueño mas importante es que su familia pueda tener una nueva garrafa de gas, porque no podian rellenar la vieja y hacia dias que solo comian comida fria; y que ademas -era invierno- la casilla estaba congeladisima porque no tenian ninguna otra calefaccion…
El segundo pibe conto que su sueño mas importante era que su casilla fuera un poco mas grande, porque no cabia una segunda cama y ya no podia dormir toda la familia en la unica cama que tenian, porque todos se molestaban al darse vueltas y nadie podia dormir realmente…
Un tercer pibe o piba dijo que su sueño mas grande es que pudieran cambiar alguna de las chapas del techo de su casilla, porque se llovia todo y tenian que ir a la escuela y su mama a trabajar con ropa toda mojada y hacia mucho frio…
Me quise morir: ¡Ni una pelota, ni una muñeca, ni caramelos ni siquiera galletitas aparecian en esos sueños!
Senti una verguenza y un dolor innenarrable de haber tenido la osadia y la brutalidad de preguntar yo a esos chicos (y sus mamas que lo oian) por sus sueños, cuando sus sueños les habian sido arrancados criminalmente desde su mas pequeña infancia, es mas, desde antes que nacieran, un ¨pecado realmente metafisico y preexistente a la historia¨ como define el pecado la Biblia en el mito de la expulsion del paraiso… El demonio padre del sistema y del imperio realmente les arrebató -antes de su propia historia- el árbol de la vida y el arbol de poder decidir sobre sus vidas y sus sueños…
Cada vez que paso por El Jalon me sigue dando escalofrio la pregunta, si acaso por algun misterio inexplicable hoy esos chicos ya sean capaces de soñar (otra vez en esta patria, como alguna vez fue mi sueño, aunque por mi propia situacion de clase nunca llegue a tenerla) ¿con una N. 5 de cuero, pero de esas con gajos cosidos?
Un gran abrazo,
Arturo Blatesky
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Seguramente que Ema y Violeta tus peques amiguitas a las que doy fe amas,conoceran antes que a la montaña como sueñan niños y niñas de la montaña a traves de tus versos ,que no es diferente por lo que cuenta Arturo que tambien es el sueño de niños y niñas de la ciudad y que este sistema brutal al que enfrentamos dia a dia les priva de soñar sueños de niños. Un fuerte abrazo.La maestra de la montaña.
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Que maravilla,que todos pudiéramos en nuestra niñez pedirle a Dios lo que deseamos,es esa etapa inocente y pura que los pedidos realmente son lo que necesitamos,lo material aún no nos han corrompido. José sólo un ser que conserva un alma tierna puede escribir estos versos.GRACIAS
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bellisimo !!
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Me encantó y me entristeció. Ojalá algún día todos los niños sueñen con pelotas y muñecas. Mucho mas temprano que tarde…ojalá.
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