Una experiencia frustrada de romper huelgas docentes con voluntarios: La Rioja 1987: Menem contra la AMP y De Leonardi. Ganaron los trabajadores!


La iniciativa del Macrismo no es original.

En 1987, Carlos Menem y su Ministro de Educación, Jorge Yoma (que luego fue kirchnerista y hoy es parte del peronismo/macrista) intentaron quebrar la lucha docente promoviendo un «voluntariado» de la mano, nada menos, que de las estructuras organicas del Partido Justicialista de La Rioja, un partido de Estado que ha gobernado la provincia desde siempre aplicando toda clase de proyectos.

El relato que reproducimos es el capitulo correspondiente del imprescindible libro sobre La Rioja que resiste que escribimos junto al colectivo de la AMP a finales de los noventa y que puede leerse como una historia de la educación, del sindicalismo docente y la Ctera y también como un pequeño manual de políticas de clase: las que aplica desde hace decadas la AMP de La Rioja.

Convencido que la aseveración walshiana no debe ser un adorno recupero para las nuevas generaciones la historia de la lucha docente, como aprendisaje e insumo conceptual

 

1987. El voluntariado: el mundo al revés

La A.M.P. fue conquistando personalidad y espacio propio en la sociedad riojana a partir de encabezar las reivindicaciones; promoviendo incansables iniciativas de confluencia y unidad de los sectores populares, democráticos y progresistas.

Así impulsa la formación de la Asamblea Permanente de los derechos humanos de La Rioja y el movimiento de solidaridad con Nicaragua, entonces protagonista de una apasionante revolución democrática y popular.

En marzo de 1985 participa en la conformación de la Coordinadora de Gremios Estatales de La Rioja que afirma en su declaración de principios: Nuestra provincia y nuestra Patria necesitan seguir los pasos de los profundos y acelerados procesos de transformaciones políticas, económicas, sociales y culturales que vive el mundo, como única alternativa para eliminar la dependencia y el subdesarrollo, construyendo así una sociedad justa y democrática….. que posibilitará la autentica liberación de los hombres y los pueblos, sucediéndose a partir de entonces una interminable seguidilla de paros y movilizaciones en procura de cobrar los haberes a término y lograr cierta actualización en sus sueldos, a fin de impedir que la inflación se los devore. A nivel nacional este posicionamiento combativo de una parte del sindicalismo tradicional se corresponde a la actitud asumida por la llamada “C.G.T. de Azopardo” que, encabezada por Saúl Ubaldini, practica una suerte de neo vandorismo.

Vandorismo era el nombre con que en los años ´60 se denominaba a la práctica de la burocracia sindical peronista de promover luchas y movilizaciones para crear mejores condiciones en las negociaciones con el estado y las patronales. Augusto Timoteo Vandor el secretario de los metalúrgicos llevó esa práctica al summun de la eficacia.

Los intentos neovandoristas de Ubaldini, junto a sus compañeros de la C.G.T. Azopardo fracasaron porque encontraron frente a sí a una burgue- sía y un Estado que ya no aspiraba al “pacto social” sino que, fortalecidos por los diez años de terrorismo de estado y los efectos de la política neoliberal, buscaba imponer autoritariamente la reconversión del capitalismo argentino por vía de la flexibilización laboral, privatizaciones, desregulaciones, apertura indiscriminada del mercado y recaudación fiscal necesaria para pagar la deuda externa que ellos mismos fabricaron.

El neovandorismo pareció supervivir mientras tuvo un gobierno radical al frente, pero apenas llegó Menem a la Casa Rosada, colapsó dando paso al sindicalismo empresarial que dedica más tiempo a los negocios que a los trabajadores.

Si bien en 1985 todavía circulaba el discurso combativo del “neovandorismo ubaldinista”, ya una parte de los dirigentes sindicales empieza a manejar un discurso más posibilista, renegando incluso del rol de presionar para negociar. Eran los adelantados del modelo de burócrata sindical; los Cavalieri, los Daer, los Lescano, etc.

En una reunión intersindical de abril de 1985, el entonces secretario de la C.G.T. riojana, Julio Corzo, desplegaría un discurso ejemplificador en una discusión sobre los caminos a tomar por los trabajadores ante la falta de pago a término de los salarios.

Diría Julio Corzo1 que no tiene sentido hacer la huelga por hacerla, lo real es que el gobierno no tiene plata, insistir con lo mismo se interpretará como una actitud golpista. Dicho esto último en un tono que bien podría ser de preocupación o de amenaza.

Instalada esa visión de la realidad (que no hay plata para los sueldos, aunque haya para pagar la deuda externa y los subsidios enormes que recibían los grandes empresarios de la entonces llamada Patria Contratista) llama a ser prácticos, lo cual en su particular interpretación quiere decir: negociemos con el gobierno a ver como nos dan un poquito más de lo que nos quieren dar, pero sin crear problemas.

El doble discurso de la dirigencia sindical de la C.G.T. de La Rioja sería lo característico: dureza en los documentos (sobre todo contra el gobierno nacional radical) y claudicación práctica ante el gobierno provincial de Menem que, sin embargo, no podía mostrar diferencias notables con el gobierno nacional. La situación de la educación, por ejemplo, así lo atestiguaba.

La Asociación de Maestros y Profesores de La Rioja tenía otro discurso, y sobre todo, otra conducta: la defensa incondicional de los derechos de los trabajadores, el protagonismo de los propios docentes sostenido por la labor autónoma de los delegados de escuela, el esfuerzo por integrar la defensa de los derechos de los docentes riojanos con el de todos los del país y la causa patriótica de darle sentido popular a la democracia reconquistada.

El 31 marzo de 1986 la A.M.P. elabora un documento titulado “El estado de emergencia educativa en la escuela pública riojana y el paro de los días 2 y 3 de abril” donde desarrolla una serie de argumentos contundentes que reproducimos:

  • La educación en la provincia está en estado de crisis, que se agrava día a día, y que tiene su origen en el dominio de los sectores del privilegio sobre los resortes de la economía.
  • El gobierno provincial se ha resignado a administrar la crisis, reduciendo su accionar a “lo posible” y practicando una metodología elitista, donde supuestos “iluminados”, resuelven todos a espaldas de los trabajadores de la educación y la sociedad. Una muestra de ello el llamado “Reglamento de licencias, permisos y justificaciones” para titulares, interinos y suplentes. Otra es la reforma hecha a la ley 2691, del Estatuto del Docente, realizada en 1985 a iniciativa del Consejo de Educación provincial. Los docentes reclaman una vocalía gremial en el Consejo de Educación para participar en la conducción de la misma.
  • La demora en abordar los debates del Congreso Pedagógico Nacional, la suma de desaciertos legislativos y lo mínimo del presupuesto educativo conforman una verdadera “Emergencia educativa en la escuela pública” como lo ha manifestado la Comisión Permanente por un Mayor Presupuesto Educativo. El presupuesto educativo de la Nación en 1985 fue de solo un 7,4 % siendo uno de los más bajos de la historia, apenas superior al récord negativo del 7,1% de 1976. En La Rioja fue del 11%, igual totalmente insuficiente. · La A.M.P. seguirá adelante con el plan de lucha nacional deCTERA por el cual ya han parado 120 horas continuas, impidiendo el comienzo real del ciclo lectivo, a principios de marzo prosiguiendo el 2 y 3 de abril con un paro total de actividades.

La lucha de los trabajadores consigue sentar al gobierno a una mesa de negociaciones el 19 de setiembre de 1986 dejando instalado el reclamo de un salario mínimo de 250 australes (por entonces, algo así como poco más de 250 dólares), y la creación de una Comisión Salarial Conjunta, pero la situación se mantiene inalterable.

Se sabe, todo problema que se perpetúa se va agravando, tornándose insostenible.

Para colmo, la situación crítica de la provincia, junto a las luchas de los trabajadores estatales, colocaba en una situación difícil a Menem en su nueva cruzada: ganar la interna peronista a Antonio Cafiero para convertirse en el candidato peronista para el ‘89.

Al frente del Ministerio de Gobierno y Educación se encontraba un operador político de primera línea: Jorge Yoma, al frente del Consejo Provincial de Educación, alguien que en los ´90 sería la Ministro de Educación provincial, la Sra. Lilian Belber de Minué de Mercado. Todos pesos pesados del menenismo.

El conflicto estallaría en marzo de 1987 cuando ante el no inicio de las clases en defensa del salario y contra el descuento de los días de huelga de 1986, el gobierno provincial respondería con el “voluntariado”, un intento de legitimar la usurpación de las aulas para los rompehuelgas disfrazados de “maestros voluntarios”, en una experiencia casi única en el país.

Durante todo febrero, la A.M.P. realiza intensas actividades de debate elaborando propuestas que lleva a una reunión nacional de C.T.E.R.A el lunes 9 de marzo, con el objetivo de consensuar la decisión de NO INICIO de clases.

Por pocos votos la propuesta no es aceptada: la diferencia es de 5000 votos en un total de 220.000 votos, al regreso de la reunión de la C.T.E.R.A., la A.M.P. eleva su reclamo salarial de 250 Australes, pedidos en setiembre de 1986, a la suma de 300 australes para el maestro de grado, con un aumento del 28% en el índice calculado para salario docente según la ley 2691 del Estatuto del Docente. A estas reivindicaciones se le agrega el pedido de no descuento de los 4 días de huelga de octubre del ‘86.

Las clases que deberían iniciarse el lunes 16 de marzo no comienzan.

Durante toda la primera semana de huelga las cosas transcurren más o menos como siempre: asambleas masivas, marchas, comunicados de solidaridad de diversos sectores populares y amenazas descalificatorias por parte de las autoridades que intentan negar lo innegable tapando el cielo con las manos.

El viernes 20 llega el secretario general de la C.T.E.R.A., Wenceslao Ariscuren, para traer el apoyo de la central de educadores. Intentan entrevistarse con las autoridades provinciales, quienes se niegan a recibirlos por estar acompañados de una delegación de la A.M.P., a cuya cabeza estaba Rogelio de Leonardi.

Durante ese fin de semana, el gobierno provincial gira en su comportamiento e intenta pasar a la ofensiva: frustrado su objetivo de derrotar la huelga desde dentro del gremio, convencidos de que los maestros están desprestigiados ante una sociedad que ve como sus hijos no pueden empezar las clases y parados en el triunfalismo que le daba el crecimiento de la candidatura de Menem en la interna del Partido Justicialista, se lanzan a quebrar la huelga con la ocupación de las escuelas por parte de militantes del partido Justicialista a quienes se los convoca a tal efecto mediante un llamamiento firmado por el secretario general del Partido Justicialista, Roberto Henry Sánchez. Compañero/a Docente: Usted está afiliado al Partido Justicialista al cuál le convoca a presentarse mañana lunes a trabajar, porque estamos convencidos de nuestra doctrina y:

1) Porque la Patria está por sobre todas las cosas

2) Porque la comunidad organizada debe resolver sus problemas

3) Porque los intereses sectoriales no deben minar su conducta

4) Porque las soluciones a los problemas salariales surgen del dialogo

5) Porque la comunidad organizada va a educar en nuestras escuelas y

debemos trabajar juntos por los humildes que quieren educar a sus hijos

Si Ud. está decidido a concurrir a la Escuela, lo invitamos a inscribirse en el Partido Justicialista “Casa de Todos”, porque estamos trabajando para garantizar la calidad de la educación de los niños en las escuelas y necesitamos saber cuantos docentes se desempeñan en cada establecimiento, para instruirlos adecuadamente sobre las misiones y funciones de los responsables escolares, responsables de grupo y auxiliares de grupo

El domingo 22 de marzo, desde el local de la calle Pte. Perón 543, denominado “Casa de Todos”, se monta el operativo.

La Sra. Lilian Minué de Mercado, secundada por el secretario técnico del Consejo de Educación, José Amadeo Varas, firma uno tras otros los nombramientos de esos maestros truchos.

Por esa acción ilegal de nombrar maestros a su gusto y capricho, fueron denunciados por la A.M.P. por abuso de autoridad y violación de deberes de funcionario público.

En diciembre de 1988 el juez Ricardo Martínez Sánchez dictó auto de procesamiento y prisión preventiva contra los integrantes del Consejo de entonces: Lilían Minué de Mercado, María Hortensia Quiroga de Rodríguez e Ilda del Rosario Mercado de Yaryura.

Por supuesto que a pesar de ello siguieron libres y la Licenciada Lilian Belber de Minué de Mercado fue premiada más tarde con el cargo de Ministro de Educación.

Sumándose a la maniobra, el contador del Consejo Educativo, la ex diputada Leticia Guzmán, Juan Fernando López (de Minería), Estela Elida Gómez (de Control y gestión) y Sergio Willan Rodríguez.

Paralelamente se monta un gigantesco operativo de prensa desde el gobierno para hacer creer a la población que el lunes 23 de marzo iba a dar inicio el ciclo lectivo. Junto con todo esto crecen las amenazas de cesantías a los docentes huelguistas, que revisten como suplentes o interinos, y que acumulen ocho inasistencias injustificadas.

El sábado 21 de marzo, a la noche, el gobernador Carlos Menem preside una reunión de gabinete para considerar la huelga docente, al terminar, el Ministro de Gobierno y Educación, Jorge Yoma, el subsecretario de Trabajo, Néstor Vergara, el Presidente del bloque de diputados justicialistas de la provincia, Miguel Morales y la presidenta del Consejo General de Educación, Licenciada Lilian Minué de Mercado realizan una conferencia de prensa para anunciar la declaración de ilegalidad del paro mediante la resolución 88 de la subsecretaría de Trabajo de la Provincia.

A pesar de tanto esfuerzo, el propio diario El Independiente (recordemos que “éste” El Independiente no tiene nada que ver con el que dirigía Alipio Paoletti, siendo claramente pro oficialista) tiene que titular la tapa de su edición del martes 24 de marzo de 1987 así: El “voluntariado” no logró normalizar la situación. Los maestros mantuvieron el paro y la concurrencia del alumnado fue escasa. Declaró el gobierno “ilegal” la medida docente y felizmente para la comunidad riojana no se produjeron incidentes.

Y ya en la nota correspondiente se admite: A la vez que se inauguró oficialmente ayer el ciclo lectivo 1987 en las escuelas dependientes del Consejo General de Educación con voluntarios justicialistas al frente de los establecimientos o colaborando con una “acción educativa popular”, el gobierno declaró en la víspera la ilegalidad de la huelga que llevan a cabo los maestros nucleados en la A.M.P., habiéndose registrado un alto índice de ausentismo docente.

Acaso el ejemplo más ilustrativo de lo ocurrido es lo que pasó en la escuela 287 donde un ingeniero puesto a maestro de primer grado, en el primer día de clase, pretendió enseñar en una sola jornada a contar del uno al diez.

Un disparate pedagógico como pretender, que alguien sin conocimientos de física, entienda la ley de la relatividad de Einstein en un par de clases.

Los pocos padres que mandaron sus niños a las escuelas, lo hicieron convencidos del discurso gubernamental de que las clases empezarían normalmente. Al ver lo que ocurría la concurrencia del segundo día fue mucho menor y el tercero ya estaba quebrado el famoso voluntariado. La A.M.P. había convocado los maestros en su sede sindical para salir a las calles y advertir sobre la realidad educativa explicando el sentido

de su lucha como defensa del derecho popular a la educación.

Fortalecidos por el éxito en quebrar la maniobra del gobierno provincial y el partido gobernante, la A.M.P. declara el Estado de Vigilia Permanente, con permanencia en el local sindical logrando que cientos de maestros se acerquen a la A.M.P., realicen cortes de calle, recorran los comercios en procura de solidaridad, y encienden fogones en las noches generando una mística de pelea que pocas veces se había conocido.

El miércoles 25 de marzo se realiza una nueva asamblea para decidir el rumbo de la lucha. Se presentan tres mociones: una que propone una tregua de 48 hs., sin levantar el paro y con estado de alerta, saca 18 votos; la docente Adriana Ferrari propone levantar el paro , saca un voto; la conducción del gremio propone continuar el paro por tiempo indeterminado convocando una nueva asamblea para el 1º de abril, obtiene 412 votos.

Lo expuesto da una idea de la disposición a luchar del gremio y de la correlación de fuerzas.

En la asamblea del 2 de abril se informa sobre una entrevista con Jorge Yoma, que no aporta ninguna solución. En el debate, que fue fuerte, impactó mucho una maestra de Aimogasta quien preguntó que pasaría si se levantaba la medida, ella misma se respondió: Nada, porque no hay propuesta. Significará seguir viviendo los 365 días del año con las migajas que no me alcanzan, ni siquiera, para poder educar a todos mis hijos

Una vez más, la docente Andrea Ferrari propone levantar el paro con el fin de posibilitar el diálogo en una audiencia inmediata con el gobernador Carlos Menem .

Era el discurso oficial: Menem decía que estaba dispuesto a dialogar y encontrar solución al tema, pero siempre que se levantara primero el paro.

Puesto a votación ganó la propuesta de continuar el paro convocando una nueva asamblea para el próximo lunes 30 de abril.

Por el paro votaron 677, 17 lo hicieron por levantarlo para hablar con Menem, quien en realidad estaba más preocupado de la suerte corrida por los carapintadas sublevados en la Semana Santa del ‘87 que por el conflicto docente o la suerte de la educación riojana.

Los maestros seguían ocupando la sede sindical, marchando por las calles con su guardapolvo blanco como símbolo y bandera, gritando algo que había costado años asumirlo, y, que acaso, era el cambio que más orgullo debería producir a la A.M.P.:

La docencia no es un apostolado,

es un trabajo,

es un trabajo mal pagado.

 

 

Testimonio de los protagonistas. Número tres: Ángela Descalzo.

La fuerza del reclamo docente

Siempre fui peronista. Me viene de mi padre que tenía la unidad básica Nº 1 de La Rioja y recibía la visita de todos los que querían ser dirigentes del peronismo. El mismo Carlos Menem venía por casa. Yo siempre fui militante del peronismo, en las elecciones del ’95 iba a ser candidata en la lista del Chingolo Barrionuevo pero por mi militancia en la A.M.P. me cuestionaron, al final el Chingolo arregló un puesto para él y nos dejó a todos colgados.

Por eso a mi me gusta más la militancia sindical, allí uno defiende a los trabajadores, el triunfo de uno es el triunfo de todos y cuando ganamos,se obtiene el reconocimiento del pueblo trabajador, no como en la política donde al final todos trabajan para conseguir algo para si mismo.

Mi primer trabajo fue en el Ministerio de Trabajo, donde llegué a ser habilitada, pero cuando llegaron los milicos me pegaron una patada en el culo mandándome a casa. En esos años sufrimos trece allanamientos. Mi pobre suegra, en casa de quien vivíamos, casi se nos muere del susto.

Cuando se fueron los milicos, entré de maestra, allí conocí a De Leonardi y a la A.M.P.

Llegué a ser de la comisión directiva, antes, había sido 12 años tesorera de la cooperativa CON. SU. CRE. VI. AMP, que presidía José De Leonardi, hermano de Don Rogelio.

Cuando ocurrió el voluntariado me pasó una cosa muy terrible. Cuando escuché que llamaban a los peronistas que estuvieran vinculados a las escuelas, fui a la reunión de ese domingo en la sede del partido en la calle Perón. Cuando entré todos me empezaron a mirar, me senté con un grupito de maestros peronistas, a los que por ir a la A.M.P. nos decían los “zurditos”. Mi viejo estaba sentado más adelante y yo veía que él sufría como loco, pero no dijo nada.

La Betty Montoya empezó a gritar que había gente de la A.M.P., nosotros no le hicimos caso, queríamos quedarnos. Si los peronistas iban a discutir la huelga, ¿por qué no podíamos decir lo que pensábamos los peronistas que estábamos haciendo la huelga?

Al final, para que no se arme más lío, tuvimos que irnos, salimos por una puertita que estaba por atrás. Al día siguiente, cuando íbamos al edificio donde funcionan las escuelas 191 (turno mañana) y la 192 (turno tarde), veo venir a mi papá junto al grupo de los que venían a romper la huelga ocupando las escuelas… El viejo, al vernos, se dio vuelta y se fue a casa. Nunca lo hablamos, pero siempre pensé que era su manera de apoyarme.

Una cosa muy cómica que me acuerdo de aquellos días, es el papelón que hizo uno que trabajaba de payaso y se hacía llamar el “Payaso Garabato”, quería enseñar los números con las cartas, iba sacando una y los chicos tenían que gritar el número. El lío se armó cuando sacó el 10 y los chicos gritaron el número que veían, él les retrucó que no, que esa era la sota de basto.

Ángela Descalzo es maestra de grado. Fue miembro de la Comisión

Directiva de la A.M.P. en el periodo 1988/1991.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s