El día que Wado de Pedro pudo haber sido Guillermo Saccomanno pero prefirió el rol de Claudio Avruj, Mario Montoto o Sergio Bergman: convalidar el Apartheid y el Genocidio israelí con su silencio cómplice.
En estos días una impresionante delegación oficial, estatal, de ambos lados de la grieta, visitó Israel, se reunión con sus dirigentes estatales, exploró negocios con la empresa colonizadora del agua Mekorot y con la nefasta industria del espionaje y las armas del Estado sionista.