La identidad militante, ese inviolable espacio de libertad..


A Graciela Rosenblum que siempre está En la cárcel de Coronda había fajineros, o sea que las labores de repartir el desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena, con su burocrática ceremonia cuasi solemne de arrastrar un carrito con una olla enorme de acero inoxidable destellante eran cumplidas por algunos presos, elegidos por vaya […]